martes, 20 de julio de 2010

Intereses o justo

Las críticas al fiscal superior, Jaime Schwarts por archivar la investigación sobre el financiamiento de los estudios universitarios de Keiko Fujimori y sus hermanos, dieron lugar a un análisis del caso en diferentes medios. Pues hasta ese momento, se creía que iban a quedar libre de toda culpa. Sin embargo no entendieron bien la investigación.

El fiscal tomó la decisión de cerrar el caso porque dice que Montesinos fue el autor del delito de peculado y que Fujimori fue cómplice primario de este delito. Por lo tanto no se les puede considerar cómplices a los hijos, por la única razón según el fiscal de que no existe el cómplice del cómplice. Pero esta investigación no es de ahora sino de hace nueve años.

El caso es que el ex presidente Fujimori pagó la educación de sus hijos con fondos públicos que recibía de Montesinos, es decir fueron transferidos del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN). Así fue que en el año 2001 la fiscal en ese entonces, Nelly Calderón, ordenó una investigación por enriquecimiento ilícito contra Fujimori, porque la cantidad utilizada no tenía justificación alguna, ya que los ingresos como presidente de la república no eran lo suficiente para cubrir tremendo gasto ( 1 millón 225 mil soles).

Pero después de casi una década, el expediente llegó a manos de Jaime Schwarts Azpur, quien resolvió el asunto en un santiamén aludiendo que los hermanos no tendrían que ser investigados por presuntos delitos de peculado ni de enriquecimiento ilícito. Pero de repente el fiscal cambió de opinión y manifestó que los hermanos Fujimori Higuchi no debían ser investigados por delito de peculado, pero sí por el delito de enriquecimiento ilícito en condición de cómplices.

Es así que el expediente retornó otra vez al despacho de la Fiscal de la Nación, pero será revisada por Flor María Alva, fiscal especialista en enriquecimiento ilícito, quien emitirá un informe sobre si se procede o no investigar a Keiko y sus hermanos.

Sin embargo hay quienes aceptan la resolución tal como el fiscal Jorge Cortez, quien considera justa la decisión de Schwartz. Según Cortez el delito de peculado lo cometen los funcionarios públicos y los hijos de Fujimori no lo fueron, simplemente se beneficiaron.

Lo raro de todo esto es por qué Schwartz y Cortez resolvieron o archivaron el caso, concluyendo que no habían elementos legales que incriminen a los hermanos Fujimori de delito de peculado. Pero más sospechoso es por qué salió a la luz ahora que Keiko está postulando a la presidencia. Acaso hay algún interés de por medio.